Hola, Albert:
Hoy he leído los tuits que has escrito sobre las obras de Sijena que Aragón no reclama. Ha sido una serie exitosa que rápidamente ha pasado a la prensa. Los he leído, fíjate qué curiosidad, mientras me tomaba un refresco en el bar del Museu de Lleida. Pero he preferido llegar a casa para responderte comme il faut, porque el móvil es un rollo para escribir y yo sentía que tenía muchas cosas que decir.
Todos esos tuits tienen un objetivo: hacer ver que Aragón reclama sólo las piezas que están en Lérida o en Barcelona, pero no las que están «escampadas» por otros museos del «estado español». De forma que la conclusión es sencilla y evidente: se trata de una reclamación política que se fundamenta solo en un rollo anticatalanista. A ver por qué, si no, lo demás no va a juicio.
Bueno, yo te lo explico. No porque no lo sepas, que lo sabes perfectamente, sino porque es menester que conste. Empezamos. Pero antes voy a dejar aquí unos datos para que se entienda todo lo que sigue: lo que se ha reclamado en los recientes juicios celebrados en Huesca son, por un lado, las pinturas de la Sala Capitular de Sijena y, por otro, las 97 piezas de este mismo monasterio vendidas entre 1983 y 1994 a la Generalitat y al MNAC de Barcelona. La reclamación de la devolución de ese patrimonio se sustenta en varios motivos, uno de los cuales es el hecho de que el Monasterio de Santa María de Sijena fue declarado Monumento Nacional en 1923, por lo que su patrimonio quedaba protegido por ley. Quedémonos con la fecha: 1923. Sé que no aceptas ese argumento, pero no nos vamos a poner ahora a discutir sobre ello; sólo me atengo a explicar el porqué de esa reclamación. Se reclaman las piezas que desaparecieron del monasterio con posterioridad a esa fecha.
Y ahora, vamos con tus tuits. Los pongo todos seguidos, aunque no sé si en orden, y luego te los comento.
(pongo la foto:)
Una buena serie, sí. Incompleta, eso también. Faltan un montón de piezas: Sijena tuvo, como monasterio real de Aragón, un patrimonio extraordinariamente rico que desgraciadamente se «escampó» por distintos lugares, sí; aunque, si te fijas, en su mayoría radica hoy en cuatro lugares, principalmente: Lérida, Barcelona, Zaragoza y Huesca. Pero hay más piezas en Palm Beach, al parecer, y en Londres, también al parecer. Y, como señalas, alguna cosa en el Prado y en Toledo. En efecto, no todo se reclama. Y algunas cosas no se han reclamado AÚN.
La cuestión es sencilla y tiene que ver con la fecha que te señalaba antes, 1923, porque marca un antes y un después. Las piezas vendidas ANTES no se reclaman. Por eso no se dice nada de algunas de las piezas que has señalado en tus tuits, a pesar de que conoces perfectamente la razón.
La caja sepulcral de María Ximénez Cornel, que está en el Museo de Zaragoza, fue adquirida en 1922.
En la misma fecha se compraron, por el mismo Museo, las dos tablas del retablo de San Juan. El MNAC tiene otras tres, compradas en 1918, que no se reclaman. Fíjate en la fecha. Y las que del mismo retablo posee el Museo de Huesca entraron en 1873, procedentes del legado de Valentín Carderera. ¿Te has fijado en la fecha?
Con el antiguo retablo mayor pasó algo parecido: se desperdigó desde mediados del siglo XIX. En 1873, también donadas por Carderera, ingresaron las tablas que hay en el Museo de Huesca. A principios del siglo XX, en 1910, se vendió otra al coleccionista barcelonés Muntadas, que pasó al MNAC en 1956. Las de Zaragoza ingresaron también en 1922, después de haber pasado por el Museo de Barcelona, que no tuvo problema en esa fecha para desprenderse de algunas piezas de su colección. Otras están en paradero desconocido porque se malbarataron durante la Guerra Civil: algunas fueron adquiridas en 1959 por un barcelonés, Xavier de Salas, que había sido director del Museo de Arte de Barcelona entre 1940 y 1948, aprox. La adquisición se hizo con Orden Ministerial en una subasta en Londres y se destinaron al Museo de Santa Cruz en Toledo. Huesca intentó recuperarlas, sin éxito. Y es probable que se vuelva a intentar su devolución. En el Museo de Lérida hay otras dos tablas, llegadas en 1970 pero no compradas, así que siguen en depósito. Esas no se reclaman. Pero es interesante el dato que das de que en 2002 (¿seguro? En su web dice que en 2003) fue adquirida en subasta una tabla por el Museo del Prado: gracias por el dato, no me constaba y es una pieza candidata claramente a ser también reclamada.
Me he dejado un tuit, que es este, porque tiene tu sello inconfundible: no dar datos.
Fragmento inédito «del retablo de Sijena», como si no hubiera habido más que uno, y subastado «hace poco», no dices dónde ni cómo. Es evidente que la protección del arte no es lo que más te interesa; como dijiste acerca de aquella tabla sobre la que mantuvimos una discusión hace varios veranos, «si llegas a saber que se la iba a quedar Aragón, no levantas la liebre». Habrías preferido que se la hubiera llevado cualquier chamarilero antes que verla por estos pagos.
Albert, tu serie está incompleta, como sabes. Faltan muchas otras piezas que están en Barcelona y en Lérida, que tampoco se reclaman y que no has incluido porque no te encajaba. Te pongo unos ejemplos. El retablo de la Virgen del Comendador, míralo qué chulo:
No se reclama porque fue vendido legalmente en 1918. ¿Te fijas en la fecha?
O las tablas de San Juan, San Fabián y San Sebastián:
Tan majos los tres, vendidas las tablas en 1918. ¿Te fijas en la fecha? Vendidos a Barcelona. Y no se reclaman. ¡Anda!
O las tablas del retablo de la Piedad, el de la capilla de San Pedro, que fue quemado parcialmente en 1936 y que acabó en Lérida en 1970, con otras muchas piezas de cuando las monjas fueron trasladadas a Barcelona, pero que, con la excepción de las tablas de la predela, no se reclaman porque no fueron vendidas, siguen en depósito en Lérida.
También sigue en depósito la silla prioral de Doña Blanca, maravillosa pieza del siglo XIV, hoy he tenido el gusto de verla de nuevo, qué cosas:
Pues nada, no se reclama tampoco, y eso que está en Cataluña… ¿Será porque fue donada en 1906, y no entraba en el lote vendido después de 1923?
En fin, no sigo que esto se está alargando demasiado. Pero te recuerdo que hay más piezas en Cataluña, ¡en Cataluña!, que no se reclaman, como el retablo de San Pedro Mártir de Verona, en el MNAC, vendido en 1906. ¿Te fijas en la fecha?
Otras no se pueden reclamar, al menos de momento, como el relicario (llamado «portapaz») que regaló el conde de Urgel a su hija, religiosa de Sijena, en el siglo XV. Era una pieza maravillosa, única, que fue vendida al MNAC en 1977, tras la muerte de la última priora del monasterio, y robada en 1991 de la caja fuerte del museo. Es uno de los episodios más bochornosos de la historia de los museos en el mundo, pero quizá no se ha aireado lo suficiente. Algún día le dedicaremos un post. Mira qué bonito era, cuajado de piedras preciosas estaba, quién sabe dónde estará después de haber sido conservado en un monasterio de los Monegros durante siglos, y eso que se conservaba en uno de los museos más importantes del mundo:
¡Ah, se me olvidaba! Hay dos piezas más, vendidas después de 1923, cuya reclamación también nos planteamos. Una es fácil porque está en las reservas del Museo de Zaragoza y no creo que haya problema para restituirla a su lugar de origen: es un cuadrito vendido en 1927 (no, no en 1925); la otra es una arqueta preciosa que está en el Museo Marés de Barcelona y probablemente será más complicado recuperarla, habrá que ir a juicio y esas cosas. No sabemos, aún, en qué fecha se vendió, pero desde luego no en 1925, como alguien ha dicho por ahí. Es esta. Y la venta se hizo sin permiso ministerial, así que por eso cabe reclamarla:
Termino ya, con un reconocimiento y una recomendación:
El reconocimiento: Josep Gudiol, en efecto, salvó las pinturas de la Sala Capitular en el 36 y lo hizo por encargo de la Generalitat, no por afán de lucro personal ni por su cuenta. No solo lo reconozco yo, lo reconoce la sociedad aragonesa en su conjunto desde hace décadas. Mírate las publicaciones de la Universidad, o las del Museo de Jaca, y dime. Solo pone en duda su actuación el abogado de Sijena, él sabrá por qué. La jueza de Huesca que emitió la reciente sentencia sobre el caso de esas pinturas se limita a valorar los datos que le fueron aportados durante el juicio y no se pronuncia, sólo duda.
La recomendación: pese a que adviertes en tu página de Twitter que ahí solo viertes «opiniones personales», no dejas de ser el conservador del Museo de Lérida, y como tal son recogidas esas «opiniones personales» por otras personas y por la prensa. Del cargo que ocupas se esperaría que fueras más riguroso y que no se te notara tanto que desprecias la postura aragonesa y sus reclamaciones. Te quejas de la politización de este tema pero tú contribuyes notablemente al barullo. Todo esto que te he dicho aquí lo sabes; por eso te hago esta recomendación de ciudadana sin cargo alguno que solo expresa su opinión y no representa a nadie, pero creo que te habla sensatamente.
Saludos.
Soy periodista y me gustaría hablar sobre el tema que me parece interesante. Como puedo hablar contigo
DIRIGIDO A ALBERTO VELASCO. ASÍ SE DICE EN ESPAÑOL : PARECE MENTIRA QYE USTED SEA RESPONSABLE DEL MUSEO DE LÉRIDA. AL PARECER POR LO QUE VEO, NO TIENE NI IDEA DE LO QUE ESTAMOS RECLAMANDO Y PIDIENDO DESDE HACE TIEMPO. SEGÚN LAS LEYES, ESTO PERTENECE A SIGENA, DICTAMINADO POR UNA JUEZ Y CON UN FALLO DE OBLIGATORIEDAD DE LA DEVOLUCIÓN FECHA TOPE EL DÍA 25 DE JULIO. USTEDES SÓLO SON UNOS POLÍTICOS Y NO PUEDEN CUESTIONAR UNA ORDEN JUDICIAL CON UN FALLO RATIFICADO POR LA JUEZ EN ESTE CASO. NO HACEN NADA MÁS QUE METER CIZAÑA ENTRE COMUNIDADES ESPAÑOLAS Y GANAS DE QUEDARSE CON TODO. LES PIDO UN RESPETO A LA JUSTICIA, Y LE PIDO AL PRESIDENTE DEL GOBIERNO QUE NO OS HAGA LA PELOTA APOYANDO VUESTRA DECISIÓN. NO HAY DERECHO A QUE SE NOS TOME EL PELO Y POR TONTOS. YA ESTÁ BIEN. !!!